Vilma… me cuesta asumir que ya no estamos juntos y tener que verte todos los días en los pasillos sin poder besarte. Aun sigo enamorado de ti, no lo olvides… que aun te sigo AMANDO.
Recuerdo que al principio no quería asumir que sentía cosas por ti, hasta que Palomares te dio un beso y sentí muchos celos. Desde ese momento, sabía que me había enamorado y ese es un sentimiento que no había experimentado nunca… nunca, pero es un lindo sentimiento.
Cuando estaba a punto de morir y tu entraste por aquella puerta, me dieron ánimos esas lindas palabras que me dijiste, y sentí que no debía dejarte sola con nuestra hija.
Ya sé que en varias ocasiones cometí muchos errores, los cuales siempre me has perdonado, y sentí que debí hacer lo mismo cuando besaste a Palomares.
Cuando te dije de dejarlo era para que estuvieras más tranquila, te tomaras tu tiempo y aclararas tu corazón. Solo recuerda que yo aun te amo hasta las trancas.
Te amo Vilma y siempre te he amado.
Tu corcho, Piti.
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